La Autoridad Portuaria de Mazara del Vallo encontró un coche estrellado en el mar cerca del muelle. Inmediatamente se inició la inspección para comprobar que no había nadie a bordo. Una vez constatada la ausencia de personas, se activó la recuperación del vehículo. Una distracción provocó que el coche cayera al mar: no se había puesto el freno de mano. Un descuido que te puede costar muy caro y es mucho más frecuente de lo que crees.
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De hecho, no es la primera vez que esto sucede. Hace apenas dos años, fue el 9 de marzo de 2022, un episodio similar. Un hombre había estacionado su todoterreno sin el freno de mano. El coche comenzó entonces a moverse y acabó en las aguas del puerto, justo al lado de una patrullera de la oficina portuaria. Incluso en ese caso nadie resultó herido. Los buzos de los bomberos intervinieron y recuperaron el vehículo con una grúa. Lo cual tendrán que hacer hoy también.
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